El desarrollo de este artículo surge ante la curiosidad que da de que a pesar de vivir en una sociedad dominada por la información, no se ha dado de forma generalizada un alto número de interesados en cursar los estudios universitarios de información y documentación en cualquiera de sus niveles.

Una situación que se convierte en reto a los profesionales de la información. Una tarea que se debe asumir dentro del marco de Bolonia que permita formular estrategias para fortalecer tanto la disciplina académica como su dimensión profesional.

Como base de este artículo se han tomado las conclusiones aportadas en la reunión de la Red de Centros y Departamentos de Información y Documentación (RUID) celebrada el 1 de febrero de 2013 en la Universidad Carlos III de Madrid. Las conclusiones señalan el grado de interés de los estudios de información y documentación para la sociedad, basándose en criterios cuantitativos, y en una débil motivación

La respuesta se encuentra en darle, y reconocer, el papel del profesional de la información en la sociedad. Un papel sumamente importante y valioso, que va más allá a ser profesionales destinados a cubrir plazas de funcionarios en bibliotecas públicas.

Los profesionales de la información deben asumir la formación universitaria en un compromiso de adaptar la formación recibida a las nuevas condiciones que caracterizan al mercado laboral en el que ha disminuido el volumen de empleo público y progresivamente ha aumentado la oferta procedente del sector privado que requiere perfiles de gestores de la información con un gran componente de dominio de herramientas y aplicaciones digitales.

En la actualidad se habla de una formación universitaria generadora de gestores de la información para la sociedad del conocimiento. En busca de una actitud más positiva y moderna.

Finalmente, cabe tomar nota de las medidas para el cambio y el fortalecimiento que fueron planteadas en la reunión de RUID (celebrada el 1 de febrero de 2013 en la Universidad Carlos III de Madrid) y aún vigentes:

  • Mejorar la enseñanza recibida.

 

  • Revisión de la oferta de posgrados de especialización, dirigidos a estudiantes del área, a profesionales y a estudiantes de otras áreas

 

  • Alianzas estratégicas con otras áreas.

 

  • Acciones de marketing para llamar la atención de la empresa privada por la disciplina.